El Rey de España no dice en el fondo nada que no diga Rajoy. De modo que uno se pregunta qué añade la monarquía.
La monarquía añade lo de siempre, respaldo metafísico, comunicación con lo eterno, imposición de manos.
En el Rey encarna la Esencia, España inmutable, una y la misma en el discurrir de la Historia. (En plan majete, claro, moderno).
Y es la Esencia a su través la que respalda al gobernante, dándole una sanción que sigue siendo sobrenatural porque vendría de más allá del tiempo.
(En épocas menos ordenadas, más brutales, menos civilizadas, teológicas antes que metafísicas, se era caudillo por la gracia de Dios).
Realeza
Deja un comentario