Los dos venenos que Europa introdujo en el mundo fueron para Nietzsche el alcohol y el cristianismo. Pero de ningún modo la ciencia. Antes al contrario, el Logos griego tal vez fuera el modo que tuvo Europa de pagar por sus pecados. La teología (cristiana) de la liberación no tiene en absoluto nada de perspectiva «otra»: «no conocerás, y el resto se sigue de ahí», esto es cristiano, o sea, europeo de cabo a rabo. Liberarse sería liberarse del crucifijo, no de la ciencia
DECOLONIAL
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