Así que parece que para poder creer como verdaderos creyentes (como es preciso para ser psicoanalista) en el célebre «complejo de Edipo», lo primero que haría falta es haber sido conformado básicamente por la sensibilidad de la mitología judeo-cristiana (leer a Sófocles pero en la sinagoga o en la sacristía, leerlo desde la Biblia).
Es cierto que Freud se dio perfecta cuenta de ello, pero lo dijo al revés, no como Deleuze, y por eso la gran diferencia.
Cultura y sujeto
Deja un comentario